Hoy este post trata de lo que a veces tenemos cerca pero nunca le damos la importancia que merece... Seguro que mucha gente puede pensar en que es caro o cualquier cosa que os apetezca, pero todas las veces que he ido a Casa Manolo siempre he comido bien, muy bien. Lo del precio pues es como todo, relativo, desde luego el marisco es marisco, pero cuando ves que un plato de pescado se va a a 20€ (lo normal en cualquier restaurante de Madrid, Barcelona o Daimuz cuando tocas pescado fresco que no sea piscifactoría) y pruebas ese pescado, ese plato, te das cuenta que no es un precio elevado, es su justo precio...
Pues eso, este fin de año me tocó trabajar y muy a gusto a una mesa de 40 amigos, comimos, bebimos y encima cobramos... Que más se puede pedir...
Como regalo a mi "camarera-compañera de viaje en la vida" que le tocó currar para variar, pues el 1 de Enero de 2010 fuimos a comer a Casa Manolo, Manolín... El restaurante está en primera línea de la Playa de Daimuz y si pides una mesa cercana al mar, seguro que ya vale la pena el viaje. Además ese día ofrecían un menu degustación que por RCP era imbatible.
Empezamos con una tapa de olivas para la cerveza...
Una cesta grande con 8 panes variados todso muy ricos para mojar aceites...
Un chupito de calabaza muy bien ejecutado para abrir papilas...
El sumiller decantando el vino... Pedimos un Taberner Shiraz pero no estaba del todo correcto, se hizo saber al sumiller quien ya había tenido algo de mosqueo al oler el vino y lo dejó 10 minutos abierto, pero al ver que no me convencía pues lo dió por problemático (de todas formas yo creo que si no lo veía perfecto no lo sirve y ya está).... Pedimos un San Vicente del 2000 que estaba correcto pero ya no en plenitud de facultades...
Buñuelos de patata y bacalao...
Al final Jamón y tomate es lo que más nos gusta jeje, una buena ración de Jamón Joselito (casi 100gr) con dos cocas de cristal...
Al final Jamón y tomate es lo que más nos gusta jeje, una buena ración de Jamón Joselito (casi 100gr) con dos cocas de cristal...
Ahí estaba el vino esperando... lástima que fue a la basura porque el Taberner hay que probarlo (a mí me gusta bastante)...
2 cogollos con atún escabechado casero y unas anchoas... Rico, fresco y apetitoso...
Foie con pan de especias y algo de boniato...
Tempura de verduras ( a mí me gustan más crudas y menos fritas)
Un regalo un lomo de caballa marinado, rico...
Una carrillera como plato principal para la "camarera-compañera de viaje en la vida" del que dió buena cuenta. Ración generosa, bien ejecutada y de gran calidad...
Rodaballo para mí con verduritas... Im-prezionante... (este plato en carta ronda los 22€) pero vale la pena...
Una rica torrija caramelizada para cada uno como postre, para equilibrar los azúcares residuales jeje...
Unos petit fours o mariconadas muy arregladitas...
Nos invitaron a una copa de cava, así como un sorbete digestivo y el lomo de caballa. Desde luego la comida rozó un alto nivel por producto y por la sencillez de elaboración resaltando el producto...
PD: La carta de vinos es amplia e interesante, así como el carro de quesos, destilados y demás... Es un restaurante para quedar bien...
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